"ARGENTINA, DE SERIO... NO TIENE NADA"

Soy un tipo acostumbrado… a que nadie respete las normas de tránsito y después se llenen la boca hablando de educación vial, o se horroricen por la cantidad de muertos en es. Acostumbrado que ante cualquier reclamo, aún siendo justificado, corten rutas o puentes, y generen un caos: largas filas de autos, camiones, micros y todos los inconvenientes a los ciudadanos.

Acostumbrado a los precios de los alimentos exageradamente altos, ya sea por la especulación de comerciantes, proveedores, o quien sabe qué parte de la cadena comercial. Nos acostumbramos a todo y seguimos dóciles, porque el ciudadano común no es capaz de ir a cortar rutas aunque le sobren motivos para hacerlo, porque se levanta todos los días a laburar o a estudiar y se queja por lo bajo simplemente. Estoy acostumbrado a la Argentina de las piñas en las canchas, porque los barrabravas son dueños del descontrol, “bendecidos por los dueños del fútbol”, algunos de los que después ingresan al otro gran negocio que es la política. Estoy acostumbrado a las piñas en las marchas políticas, entre sindicatos, entre policías y obreros, entre obreros contra obreros, desocupados contra señoras de barrio norte, diputados contra ex diputados, ¡qué idiotez! Sin dudas que somos el país de la intolerancia, y así nos ve el mundo, porque ya no aprendemos como sociedad, enferma de mediocridad. Acostumbrado a que en toda oficina pública te pidan unos “pesos”, para hacerte el trámite “más rápido”, y ver la cara de los otros que siguen esperando en las filas. Este país cargado de inútiles que se regocijan con la viveza criolla y se creen estrellas, poderosos, o vaya a saber lo que piensan. Acostumbrado a ver las mismas porquerías en la TV y que los programas que supuestamente los critican les den más prensa y espacio analizándolos. A las acusaciones cruzadas, entre funcionarios y dirigentes, algunas veces sin argumentos y otras con calificaciones tan absurdas. A vivir rodeado de discriminación; es innegable lo que se percibe día a día en las calles... diferencias por color de piel, por peso, o principalmente por condición social. En los jóvenes esto se palpa mucho más, y muchos otros aspectos que constituyen a un tejido social cada vez mas desintegrado. Por eso cuando veo el slogan del gobierno: “Argentina, un país en serio”, no puedo evitarlo y empiezo a reírme.

1 Opiniones:

Anónimo | 25 abr 2008, 11:45:00

"ARGENTINA UN PAIS EN SERIO"
CREO QUE EL PROBLEMA ES EN REALIDAD UN ERROR DE IMPRESION POR OMISION DE SIGNOS DE ORTOGRAFIA:
"AREGENTINA, UN PAIS EN SERIO???"

"Y ASI CONCLUYE EL DIA"...
UN GENERAL ROMANO TRAS LA VICTORIA

SALUDOS MAN NLF. UN SEGUIDOR¡¡¡